Intel quiere dar un último giro de tuerca a la arquitectura Westmere, la anterior a Sandy Bridge, presentando tres nuevos procesadores para portátiles Core i3 390M, Core i5 480M y Pentium P6300.Todos ellos son versiones que mejoran las frecuencias de trabajo de sus predecesores, quedando en 2,66 GHz para los modelos Core i, y en 2,27 GHz para el Pentium P6300. Todos los modelos tienen 3 MB de caché, dos núcleos, chip gráfico y controladora de memoria integrados en el mismo encapsulado.
Las diferencias entre ellos son -aparte de la frecuencia- que el modelo Core i5 dispone de Turbo Boost que permite que funciona a una frecuencia mayor en procesos de un solo hilo. El chip gráfico trabaja a mayor frecuencia que el Core i3 y ambos disponen de HyperThreading. El modelo Pentium podríamos clasificarlo como el modelo pobre de la nueva hornada, sin HyperThreading ni Turbo Boost.
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